A propósito de la historia ¿Qué saben los alumnos de educación básica de la guerra de independencia y la revolución mexicana? Esta es la pregunta que nos planteamos un grupo de profesores de la Normal de San Marcos.Durante mucho tiempo hemos partido del supuesto que lo que impera en la enseñanza de la historia es la que denominó don Luis González como la “historia de bronce”, es decir, una focalización en fechas, nombres, personajes, lugares, de ahí que nuestra hipótesis sea que dichos tópicos deberán estar presentes en los aprendizajes de la historia. Además, como ha habido diversas estrategias de actualización para renovar la enseñanza de la historia, sería de suponerse que la cronología, la secuenciación causal y la continuidad temporal (Pozo, 1991) tendrían que comenzar a “tomar cuerpo” en las formas de enseñanza, lo mismo que los aprendizajes logrados por los alumnos.