"Desde la última década del siglo XX las TIC han transformado las prácticas de colaboración, transmisión y validación del conocimiento científico; han ofrecido a la comunidad académica mayor apertura en materia de comunicación científica, al tiempo que han permitido consolidar los vínculos de la relación ciencia-sociedad. En el contexto de la Ciencia 2.0 –entendida como la aplicación y colaboración de recursos web entre expertos– se reconoce que el conocimiento es uno de los pocos bienes comunes que, al compartirse, se acrecienta; ya que permite discusiones horizontales e incluyentes dentro de la comunidad de científicos y, por tanto, una de sus principales características es la disposición para que cualquier usuario interesado en consultar o reutilizar datos derivados de la investigación científica pueda hacerlo, sin ninguna restricción económica, legal o cultural. Del mismo modo que el Acceso Abierto postprint a los resultados de investigación generó un cambio radical en la comunicación de la ciencia; el día de hoy emerge la discusión acerca del acceso abierto a los datos crudos. Es decir, poner a disposición de la comunidad académica interesada los datos duros como fuente de análisis para investigaciones derivadas: series de datos, resultados, proyecciones, revisiones, tendencias; todo ello previo al análisis del investigador o del grupo de investigación encargado del recogimiento de datos. En este documento se analiza la importancia de los repositorios de datos como espacios idóneos para almacenar y distribuir el patrimonio de una comunidad científica, al tiempo que se constituyen en elementos que potencian la inclusión social en el contexto de la ciencia abierta."