La estandarización de los procesos de enseñanza y estrategias metodológicas  usadas en la mayoría de salones de clase  hace que posiblemente no se aproveche las habilidades, aptitudes, destrezas que se derivan de los distintos estilos de aprendizaje de los estudiantes. Las formas de aprender son distintas de acuerdo a la formación previa, la experiencia, las vivencias y la historia de los estudiantes. La determinación del estilo de aprendizaje de un estudiante permite determinar que planificación didáctica y que actividades son aquellas que permiten el máximo aprovechamiento de las habilidades, capacidades, aptitudes de los mismos. Mediante la aplicación del test CHAEA el mismo que ha sido validado y tiene alto índice de confiabilidad  se logra clasificar al estudiantado de un aula de clase de acuerdo a su estilo de aprendizaje; la diversificación de los procesos educativos según sus características propias ha permitido obtener  mejores resultados cuantitativos en distintos periodos del año escolar en la asignatura de matemática. La metodología de este estudio consistió en la aplicación a toda la población del test CHAEA para determinar el estilo de aprendizaje de cada estudiante, luego se determinó las estrategias según cada estilo y la posterior micro planificación curricular encuadrada a los distintos estilos. Los resultados fueron significativos  en cuanto a la mejora sustancial de las calificaciones y  promedios cuantitativos en relación del periodo en el que se aplicó la planificación tradicional unificada en contraste con los mejores resultados académicos obtenidos  mediante la micro planificación  y aplicación de actividades congruentes con el estilo de aprendizaje de cada grupo de estudiantes. La percepción de personalización y familiaridad de los estudiantes mejora humanizando el proceso educativo.