En la escuela primaria se aborda el problema de los ambientes de aprendizaje, donde el propósito de esta investigación es tratar de describir qué tipo de indicadores es importante considerar con vistas a ese análisis de aprendizaje en un aula de educación. El espacio entendido como ambiente de aprendizaje, puede aplicarse al ambiente escolar. Cuando entramos a un centro educativo, las paredes, el mobiliario, su distribución, los espacios muertos, las personas, la decoración, limpieza, en fin, todos nos hablan del tipo de actividades que se realizan, de la comunicación entre los alumnos de los distintos grupos, de los intereses de los alumnos y profesores, de las relaciones con el exterior, etc. Una preocupación básica para el maestro de educación es descubrir cuáles son los elementos que hacen que su clase funcione o no, que el ambiente que ha creado sea eficaz en relación a los objetivos formativos que se ha propuesto. Llevar a cabo una evaluación del ambiente de aprendizaje implica, un proceso cíclico de cuatro fases: identificar, observar, analizar e intervenir. En definitiva, la observación del espacio del aula debe servirnos para mejorarlo de modo que responda mejor a nuestras intenciones educativas, pero también para replantearnos las mismas.