El desarrollo de conceptos matemáticos tempranos ocurre fundamentalmente en el hogar y en la escuela. La implicación de los padres, a través de las actividades numéricas cotidianas, cumple un rol fundamental ya que estas actividades maximizan las oportunidades para el aprendizaje. El objetivo de este proyecto fue medir los efectos de una intervención con padres que apuntó a fomentar la realización de actividades numéricas en el hogar con el fin de mejorar el desempeño matemático de los niños.Se conformaron dos grupos de padres que participaron de 3 talleres quincenales: el grupo de padres donde se fomentan las actividades numéricas y el grupo de padres donde se fomentan las actividades de lectura. Antes y después de los 3 talleres se realizaron evaluaciones cognitivas individuales a los niños (N=40) en las áreas de matemáticas (TEMA-3), vocabulario e inteligencia general (K-bit). Los resultados muestran que los niños cuyos padres participaron de los talleres de actividades numéricas obtuvieron una mejora significativa en sus habilidades cognitivas matemáticas. Esta mejora también ocurrió para los niños del grupo de lectura. A su vez, los niños cuyos padres participaron de los 3 talleres de lectura, mejoraron significativamente en la medida de vocabulario, pero no así en matemática. Estos resultados nos permiten destacar la importancia de fomentar la implicación de los padres en el aprendizaje de la matemática a través de actividades cotidianas en sus hogares.  Para ello, es necesario el trabajo en conjunto que permita fortalecer el vínculo entre la institución educativa y las familias.