Desde la década del 70´la sociología de la educación ha puesto en debate la situación de los sistemas educativos republicanos a partir de cuestionar sus ideales de igualdad. Han identificado empíricamente la existencia de mecanismos inherentes en el propio sistema que producen y reproducen procesos que justamente generan lo contrario, la desigualdad educativa. Aún cuando desde el discurso oficial y hasta normativo proyectan la posibilidad de concretar la igualdad educativa, las investigaciones han identificado a dicha proyección es un “mito”. Claramente los mecanismos propios del sistema educativo son responsables en la producción y reproducción de las desigualdades, pero estos existen gracias a que son sostenidos por procesos mas complejos desde los cuales emergen, las desigualdades sociales provenientes de aspectos culturales, económicos, políticos, de género, y hasta de credo. El /los sistemas educativos se encuentran así frente a un dilema esencial que los determina, y es sobre la base de este dilema, sobre la que se construye cotidianamente la realidad escolar. La práctica escolar se encuentra así, en su origen enmarcada en una contradicción política que le da o le quita sentido, depende de los fundamentos teóricos de quien desarrolle la práctica. Razón por la cual promover la “igualdad” de la educación, implicará brindar de herramientas muy sólidas a quienes sean responsables pedagógicos de las instituciones. En este trabajo se intentan presentar una serie de elementos capaces de dar complejidad a dicha contradicción, invitando a dilucidar cuáles podrían ser los caminos a emprender, de cara a volver al mito, una realidad.