El presente trabajo tiene como objetivo apuntar las potencialidades metodológicas de la reapropiación crítica de la historia constitucional para interpretación de la Constitución Federal Brasileña de 1988, apta a enfrentar las desigualdades raciales constitutivas de la formación social en Brasil. Esta reapropiación crítica es relevante, mientras que la narrativa oficial ha borrado el impacto de la experiencia de los quilombos en su lucha por la libertad, la igualdad y el acceso a la tierra. En ese sentido es fundamental enfrentar el pasado, ya que la historicidad de la Constitución es un proceso de politización imprescindible para la construcción de sentido de los derechos en el presente y en el futuro. La Constitución asumió un carácter supralegal, posibilitando que el derecho sea fundamentado en sí mismo. En el contexto de una eticidad reflexiva se viabilizan disputas sobre sus sentidos, en razón de la apertura e incompletud de los derechos fundamentales. Aquí el problema de la efectividad de los derechos fundamentales es enfrentado por la tensión sobre la narrativa de la historia constitucional a partir de un desplazamiento que se apoya en la matriz histórico-jurídica producida por las diásporas afrobrasileñas. El art. 68 del ADCT es un dispositivo innovador, pues evidencia la centralidad de las tensiones raciales en la historia brasileña y permite confrontar qué tipo de narrativa prepondera en los discursos jurídicos acerca de la realidad pasada y presente de desigualdad racial. La trayectoria-experiencia de los quilombos, mientras lucha por autonomía y reconocimiento del negro en la historia brasileña, imprime densidad normativa al artículo, ya que el carácter abstracto, universal y abierto de los derechos fundamentales necesita de un enraizamiento histórico con soporte en los movimientos de lucha y afirmación de la igualdad, de la libertad y de la ciudadanía, redimensionando los principios constitucionales sobre bases más plurales y democráticas.