Desde un enfoque etnográfico se aborda el proceso de reconfiguración identitaria de 22 jóvenes indígenas universitarios que migraron del campo a la ciudad. Las y los participantes estudian en tres universidades del estado de Chiapas: Universidad Autónoma de Chiapas, Escuela Normal Indígena Intercultural Bilingüe Jacinto Canek y Universidad Intercultural de Chiapas. Se buscó incluir jóvenes de tres universidades con modelos pedagógicos distintos a fin de contrastar las interacciones sociales mediadas por la configuración institucional. A su llegada a la ciudad las y los jóvenes experimentan una fase de adaptación identitaria que incluye cambios en su forma de vestir, hablar y comportarse. La segunda fase es el ocultamiento de su identidad étnica producto de la discriminación vivida en la ciudad. Sin embargo, también existen algunos elementos identitarios que continúan como la lengua y el apego al territorio, por lo que la tercera fase identificada fue la de continuidad. Finalmente, la última fase encontrada fue la de revaloración. Los y las jóvenes refieren estar orgullosos de su pertenencia étnica pese a haber pasado por fases donde negaron u ocultaron su identidad. Se encontró que la interacción social y el heteroreconocimiento recibido de sus docentes y pares fueron fundamentales para la revaloración de su origen étnico. Así también los y los jóvenes incorporan e internalizan a su identidad elementos del discurso universitario y las características propias de la carrera que estudian. Estos procesos dinamizan, complejizan y enriquecen sus procesos de reconfiguración identitaria.