En el  presente artículo se aborda la problemática de la recolección de basura ineficiente, desde la óptica de la buena Administración Pública y el derecho fundamental de los gobernados a gozar de ésta. En este sentido, hablaremos de la Administración Pública entendiéndola como un conjunto de órganos mediante los cuales el Estado, las entidades de la Federación, los municipios y los organismos descentralizados atienden  a la satisfacción de las necesidades colectivas, las cuales constituyen el objeto y esencia per sé de los servicios públicos[1]. Así, al hablar de satisfacción de necesidades de los gobernados por parte del Estado, encontramos la figura de los servicios públicos como herramienta indispensable del Estado para la satisfacción de las mismas y, por ende, la consecución de la dignidad humana, principio y fin de los derechos fundamentales. Es pues que para el caso del municipio de Ensenada, Baja California, situamos a la recolección de basura como un servicio público que impacta actualmente de manera negativa y directa en la calidad de vida de los gobernados. Por lo anterior que en el desarrollo del presente artículo se describen los diversos derechos fundamentales que se violentan al brindar de manera ineficiente el servicio de recolección de basura, con independencia del derecho a la Buena Administración Pública y, del mismo modo, se expone al lector los instrumentos con los que cuenta para hacer efectivo su derecho a la Buena Administración Pública. [1] DE PINA VARA Rafael. Diccionario de derecho. Edit. Porrúa. 33a. Edición México, 2004. P. 60.