La presente investigación se centra en el análisis de la relación entre la inteligencia emocional y el bienestar psicológico de estudiantes de psicología. La inteligencia emocional amplía el concepto de inteligencia hacia las características de la personalidad, las capacidades sociales y emocionales de los individuos, en vez del exclusivo énfasis en la capacidad intelectual. Se trata de un estudio cuantitativo, correlacional, de alcance transversal, donde se aplicó a una muestra representativa de 230 estudiantes los instrumentos encuesta sociodemográfica, la escala Trait Meta-Mood Scale-24 o TMMS-24 de Salovey et al (1995) y la escala de Bienestar psicológico de Ryff  & Keyes (1995). Se busca resaltar la importancia del desarrollo de estas habilidades en los estudiantes de pregrado, con mayor pertinencia en aquellos que se están formando para ser psicólogos. A partir de los resultados obtenidos se puede afirmar que al igual que en las investigaciones de Bermúdez, et al., (2003) y Ferragut & Fierro (2012) se presentan relaciones significativas entre la inteligencia emocional y el bienestar psicológico. Mostrando esto el gran valor que posee el reconocimiento de las emociones propias y de los otros, así como el manejo de las mismas; frente a la autopercepción del bienestar.  Esto equivaldría a tener inteligencia emocional. En el caso del presente estudio es la claridad o comprensión de las emociones la dimensión de Inteligencia Emocional que predice un mayor bienestar psicológico en general. Así que se puede afirmar que los estudiantes de psicología poseen claros elementos de comprensión de sus emociones y la de los otros. Ésta claridad emocional da cuenta de la comprensión del estado emocional en la extensión de sus tres elementos, fisiológico, cognitivo y conductual, reconocer los estímulos que la generan y la transición entre una emoción a otra.