Actualmente, los países que conforman la iniciativa de Gobierno Abierto (AGA) engloban en su práctica, ciertas características del contexto social y tecnológico de los últimos tiempos. Con ello, se ha logrado articular y legitimizar las decisiones gubernamentales, con la participación ordenada de ciudadanos que colaboran activamente en los problemas públicos, basados en información oportuna y de calidad. En este sentido, es necesario recalcar el ideal de que la información debería ser “oportuna y de calidad”, pues al analizar los datos que arrojan los sistemas de transparencia gubernamentales, carecen de todo ello. Además, este tipo de información no ha logrado la consolidación de verdaderas estrategias que materialicen políticas públicas asequibles. El trabajo que propongo a su consideración, viene a enaltecer la viabilidad del derecho humano a un medio ambiente sano, contando con información ambiental verdadera, utilizando los mecanismos de participación ciudadana y con ello establecer las bases para alcanzar la justicia en asuntos ambientales. La investigación que deseo comunicar en este Congreso es novedosa y de impacto mundial, debido a que en México ha venido gestándose desde la Suprema Corte de Justicia un nuevo derecho a la verdad, derivado de la violación de diversos derechos humanos, recalcando la necesidad y el derecho que tiene la población de contar con información fidedigna y comprobable en todos los asuntos ambientales. Así pues, a pesar de que la información ambiental en México es materia novedosa, al momento se encuentra evolucionando y la propuesta permite solucionar el vacío e impertinencia de las respuestas burocráticas, para caminar hacia la divulgación de resultados netos a favor del ambiente.