En la presente investigación se profundiza sobre la individualización de la pena como una estrategia en el combate al hacinamiento y una alternativa de desarrollo humano del interno en los centros penitenciarios. El quantum de pena o la individualización de la pena, consiste en determinar la cantidad y calidad de bienes jurídicos que se privarán al autor del delito, aplicado a cada caso en concreto. La individualización de la pena tendrá entonces, como propósito  la reducción del tiempo al cual será privado de su libertad el sujeto, como una estrategia que pueda adoptarse para reducir el hacinamiento carcelario. El sujeto A quien solicitó no se revelara su nombre, es un custodio que labora en el centro penitenciario de la ciudad de Ensenada Baja California México, sostiene que los reclusos que tienen penas superiores a 15 años, asumen que no tendrán oportunidad de reinsertarse socialmente, lo que dificulta su control “es común que te digan ¿Qué me harás, me darás otros 20 años? ellos están conscientes de que en las condiciones de la prisión, posiblemente no vuelvan a vivir en libertad.   De acuerdo con Ormanza (2014) el hacinamiento en los centros penitenciarios  es uno de los elementos que contribuyen a la violación de todos los derechos fundamentales; otra posible consecuencia suelen ser los graves problemas de salud, de violencia e indisciplina, además de ser una forma de pena cruel, inhumana y degradante. Se ha enfatizado en que las penas privativas de la libertad, deben ser aplicables de manera proporcional en relación con el nivel de peligrosidad del sujeto. Se ha sostenido que la individualización de la pena, no solo resulta una estrategia efectiva en el combate al hacinamiento, sino que contribuye al respeto de los derechos del interno, al desarrollo humano y aumenta la probabilidad de su reinserción.