Tal y como lo planteará Louis Althusser en su texto "Aparatos Ideológicos del Estado" este último se constituye a partir de las políticas que implementa y las instituciones sociales al que son dirigidas  en un instrumento de ideologización que determinará el papel de los individuos en la sociedad. Así pues, esta dinámica  que él denominó interpelación, tiene la función de la reproducción de prácticas sociales que sean favorables a una determinada lógica de dominación. Fundamentado en lo anterior, lo que se pretende exponer con este trabajo,  es que el nacimiento del Estado en América Latina, y su determinada fundamentación Republicana, jugó ciertamente, un rol ideológico de interpelación, que  estuvo al servicio de una lógica de dominación socio económica fundada en la adquisición y posesión  de la tierra. Dicha idea, tiene como base el hecho de que aunque la tradición republicana, plantea que  la libertad antes del liberalismo moderno estaba asociada realmente al no sometimiento de la voluntad arbitraria de otra persona, y que en las repúblicas italianas del siglo XV se partía de una idea de ciudadanía  autogobernada, sin sometimiento del imperio, y en el que las riquezas eran distribuidas para los ciudadanos primando el bien común, este discurso se asoció en las diferentes Republicas latinoamericanas de principio del siglo XIX a las ideas liberales planteadas por los Contractualistas clásicos, que ideológicamente establecieron un discurso que recogía los intereses de los diferentes grupos sociales dentro del estado monárquico, pero que en la praxis, dichas ideas favorecieron en A. L.  al criollato y la  burguesía extrajera, al establecer dinámicas de apropiación de la tierra y la mano de obra asalariada de campesinos e indígenas.