Desde sus orígenes el Desarrollo Sostenible guarda una preocupación genuina por lograr la preservación ambiental y llamar la atención sobre el uso responsable de los recursos naturales considerando su disponibilidad para las futuras generaciones, promueve además la armonía entre el desarrollo y sus complejidades y los supuestos de Sustentabilidad Ambiental, de este modo busca trascender el espacio teórico mediante la realización de acciones concretas que contribuyan a lograr objetivos medibles y metas verificables en periodos de tiempo específicos y esfuerzos permanentes; quizás la apuesta más importante del Desarrollo Sostenible de la última década se remonta a la formulación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que actualmente son materia de políticas, estudios, análisis y toda suerte de esfuerzos a nivel mundial.El valor auténticamente impreso en la teoría del Desarrollo Sostenible y la Sostenibilidad Ambiental controvierte la idea del desarrollo ligado a las prácticas industriales y económicas del siglo XX, que no reflejaban interés por las crisis ambientales o la pérdida de capacidad ambiental mundial para sustentar dicho desarrollo; en la práctica, sin embargo, varios estudios llaman la atención sobre la percepción de que el Desarrollo Sostenible se convierte en una forma de discurso que no logra trascender a la realidad y bajo el cual se siguen fomentando las viejas prácticas del desarrollo, a ello se suman disciplinas y estudios que de alguna forma promueven la instrumentalización del medio ambiente bajo este enfoque.