La discusión teórica sobre fenomenología de la innovación ha sido un tema recurrente, el acervo documental e investigativo disponible deja en evidencia que la discusión se concentró inicialmente en cuatro clases de innovación, a saber: (1) innovación de aplicaciones, (2) innovación de producto, (3) innovación de proceso e (4) innovación de modelo de negocio. De esta primera concentración, se despliegan subtipos que buscan dar respuesta en términos de clasificación, al exponencial crecimiento en los diferentes ámbitos de producción de la sociedad. De ahí que, se consolidaran esfuerzos para medir las actividades científicas, tecnológicas y desarrollo, de la mano de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la cual promueve una serie directrices para los estados miembros, agrupadas en manuales como: Frascati (1963) y Oslo (1997). Por su parte, otros organismos e iniciativas internacionales tales como: la Organización de los Estados Americanos (OEA), la Red de Indicadores de Ciencia y Tecnología -Iberoamericana e Interamericana- (RICYT) y el Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED) han promovido un manual homologo a los mencionados, denominado: Manual de Bogotá, enfocado a la normalización de Indicadores de Innovación Tecnológica en América Latina y el Caribe. El propósito de esta comunicación  es trazar una taxonomía de las innovaciones con la finalidad de identificar en el amplio espectro, cuáles de estas se orientan a las prácticas sociales contenidas en las actividades asociadas a la apropiación del conocimiento en el quehacer de los laboratorios de investigación adscritos a las Facultades de Artes y Humanidades y de Ciencias Económicas y Administrativas del Instituto Tecnológico Metropolitano de Medellín.