Debido a las necesidades educativas actuales es relevante que la investigación en la educación sea vista como una herramienta que permita lograr la transformación de la realidad social. La investigación científica ha tenido cambios que nos marcan las diferencias de cómo abordar el objeto de la investigación. Desde las dos grandes perspectivas metodológicas conocidas como cualitativa y cuantitativa, abrieron alternativas metodológicas como la etnográfica, la bibliográfica, la fenomenológica, la etnometodológica, el internacionalismo simbólico y así la investigación-acción la cual en este caso se muestra como estrategia para el desarrollo en las políticas educativas emergidas de la globalización y la sociedad del conocimiento. Esta opción metodológica da la posibilidad de acrecentar el conocimiento, a la vez que da respuestas concretas en todos los participantes de la investigación, ya que colaboran activamente en el proceso investigativo siendo co-investigadores. Lo que implica pasar de un conocimiento práctico a un proceso de reflexión crítico y teórico construido con la interacción y el conocimiento pedagógico como dimensión social. La investigación acción es una metodología que asume una concepción socio crítica y socio constructiva la cual permite que los actores sociales, tengan espacios de diálogo, reflexión y construcción de conocimiento sobre las necesidades que requieran ser atendidas dentro de sus prácticas, como herramienta epistémica y metodológica heurística para estudiar la realidad educativa, la cual permite lograr transformaciones asumiendo la concepción socio crítica o socio constructiva en la que los actores sociales hacen una construcción de los problemas que puedan estar afectando las prácticas educativas dentro y fuera del aula.