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Se parte del siguiente supuesto: existen analogías entre la red hídrica y la red de internet que, desde lo formal y lo simbólico, nos permiten reconocer la existencia de vínculos que generan modos de confrontación y de participación entre la gente, en cuanto a la utilización de recursos vitales para el ser humano: el agua y la comunicación.Se pretende responder a la necesidad de revalorizar la cultura del agua en Mendoza, conocer si la utilización de este recurso implica condiciones y consecuencias sobre la forma y la estructura urbana y por ende en la manera de relacionarnos con ella.La propuesta se encuadra dentro de la investigación artística, aludiendo a una disciplina que incluye además de la creación de una obra, una fase de investigación que genera conocimiento y permite la elaboración de un discurso, que pretende contribuir al conocimiento, comprensión y valoración de la teoría del arte latinoamericano.Se tomaron prestadas de otras disciplinas muchos de sus métodos y herramientas:Para la realización de la obra, se tomó la metodología del diseño. Partiendo del modelo de proyectación de Gui Bonsiepe, que propone tres etapas:•             Estructuración del problema, desde una metodología cualitativa.•             Diseño, tomando el proceso de producción utilizado para el cine de animación. Preproducción.•            Realización, rodaje de la obra de animación y una Fan Page que permite que los espectadores participantes, se vinculen entre sí y con la obra, de diferentes maneras.Luego se expuso el prototipo y se analizaron las experiencias de quienes interactuaron con el mismo, partiendo de un método abductivo y empleando técnicas fenomenológicas.Algunas conclusiones preliminares permiten dilucidar la existencia de una idiosincrasia propia del ciudadano mendocino en cuanto a las formas de relacionarse con las acequias y por ende de ciertas formas comunes de relación con el agua y la red.