El objeto de estudio de la presente investigación es la producción visual en México, asociada con las manifestaciones estudiantiles de los años sesenta, específicamente la obra propuesta por el Movimiento Estudiantil Popular, compuesta por estampas (o grabados), realizados principalmente en la técnica de linóleo y de carácter crítico, urbano y popular. Durante esos años la producción de imágenes fue abundante y variada, tanto en temáticas como en soportes, dados el contexto artístico (influido por las propuestas de Fluxus y de otras posvanguardias) y el cultural, caracterizado, entre otras hechos, por los movimientos estudiantiles (nacionales e internacionales) y por una crítica generalizada a los juegos olímpicos. Pese a la diversidad de manifestaciones artísticas de esa época (entre las que podemos encontrar, además de la estampa, escultura, pintura, intervención, videoarte, performance, apropiación, etc.), se observa que gran parte de la producción plástica y visual de este periodo remite a un hecho común: la violencia, ya sea como trasfondo contextual, o bien, como motivo (consciente o inconsciente).