Esta ponencia estética examina de manera filosófica y científica la relación entre computación y creatividad artística. Actualmente, se critica la idea de que un algoritmo pueda ser artísticamente creativo. Hay pocos defensores de la idea de que el Arte Generado por Computador (CG-Art) cumpla con la definición de creatividad propuesta por Margaret Boden (2011), esta es, la capacidad de generar ideas o artefactos que sean nuevos, sorprendentes y valiosos. Además, se ha señalado que CG-Art no es fundamentalmente arte, porque el arte se considera una manifestación humana única y exclusiva de nuestra especie. Por el contrario, propongo que la negación de CG-Art como arte tiene un sesgo antropocéntrico. Para demostrar esto, utilizo estudios recientes en ciencia cognitiva sobre creatividad artística. Así, puedo mostrar que detrás de la negación de la capacidad artística creativa de las máquinas subyace un misticismo negacionista de los avances científicos actuales.