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Uno de los temas que más ha llamado nuestra atención, en los últimos tiempos han sido la tutela efectiva de los derechos humanos, en el llamado el nuevo penitenciarismo moderno. Eso implica que toda la estructura, y funcionamiento de los Centros de Reclusión en México, deben girar en torno al respeto irrestricto de los derechos humanos, como punto neurálgico en los procesos de reinserción social de los sentenciados. Lo anterior es así, debido a la entrada en vigor de la reforma constitucional, promulgada el día 18 de junio del año 2008, incorpora a los derechos humanos, como eje central en el desarrollo de la vida penitenciaria. En dicha reforma constitucional, fue muy significativa debido a que modificó una serie de preceptos constitucionales, siete de ellos en materia penal, que comprendieron de los dispositivos normativos del numeral 16 al 22 constitucionales, sentando las bases para el tránsito de un modelo inquisitivo a uno acusatorio de justicia penal democrático en México, ad hoc con estándares de derechos humanos constitucionalmente reconocidos.Lo cierto es que que a consecuencia de los altos indices delictivos en méxico las detenciones se ha incrementado el hacinamiento en las prisiones mexicanas, con ello, surgen una serie de propuestas por un lado destaca la pena de muerte y por otro lado, las posturas derechohumanistas que resaltan la reinserción social de los sentenciados.La ponencia pretende describir los principales retos y desafios en la observancia de los derechos humanos que deben ser respetados en las prisiones mexicanas.