La migración irregular es un fenómeno que interrelaciona aspectos económicos, sociales y de seguridad que inciden en la sociedad actual, problema que se remonta en países como Europa, Italia y E.E.U.U desde mucho tiempo atrás. Dentro del marco jurídico se puede observar la falta de reformas y mecanismos en materia migratoria que respondan a los tratados internacionales adoptados por los Estados constitucionales garantistas de Derechos generando una violación a los derechos humanos y una falta de coherencia entre legislación internacional y normativa nacional de cada estado. En los últimos años, se ha podido observar un incremento de movilidad humana provocado por varios factores, sin embargo, la mayoría de procesos de migratorios se lleva de manera irregular, se estima que en 2015 había aproximadamente 244 millones de migrantes internacionales en todo el mundo, representado en un 3,3% de la población mundial.[1] Los derechos y garantías se encuentran determinadas en todo ordenamiento jurídico y genera la necesidad de que exista coherencia y se responda con lo establecido en la norma internacional permitiendo respetar los derechos humanos y más aún el interés superior del niño y que puedan tener acceso a cada uno de ellos, respetando su lugar de origen y prohibiendo todo tipo de discriminación entre los seres humanos. Estas discriminaciones y vulneración de derechos se encuentran en todos los países receptores. Es por eso por lo que considero necesario dedicarle un espacio académico a este grupo prioritario que son los niños, niñas y adolescentes en situación de migración irregular. Es así como se pretende estudiar los mecanismos y garantías jurisdicciones con las que cuentan este colectivo y el cumplimiento de estas para evitar la vulneración de sus derechos. [1] DAES,2016