En este tiempo de distanciamiento social, los responsables de la educación artística buscan reducir la distancia a través de la cultura y la comunicación, con una constante oferta y renovación de contenidos en las distintas plataformas digitales, ya sean sitios web o redes sociales. Desde sus estudios y hogares, docentes y artistas de diferentes partes del mundo le han sacado provecho a estos días de aislamiento, han mejorado en sus técnicas además de reflexionar sobre este momento histórico que nos ha tocado vivir, buscando que los estudiantes plasmen sus emociones en lienzos, apostando por aquellos lenguajes reflexivos y bajo el pensamiento crítico en donde la visualizad juega un papel muy importante en este tiempo de incertidumbre.El confinamiento ha propiciado que quienes están involucrados en el área cultural y la educación artística, busquen alternativas de comunicación para seguir manteniendo el diálogo con sus estudiantes, en una clara demostración de la función social de las artes. Se sabe, el papel fundamental del arte, a lo largo de la historia, el cual ha sido relevante en momentos de tensión, por lo que la situación actual parece un parteaguas para los contenidos pedagógicos en relación a la expresión. Si bien, la priorización de la salud física y la cercanía a la muerte o a la enfermedad traen consigo complicaciones a la salud mental, es importante destacar que la reflexión artística al respecto funciona como una especie de calmante que figura como catalizador para el espíritu.  Es por ello que se enfatiza como a lo largo de la historia, el arte ha evidenciado lo frágil de la existencia humana, esa cíclica existencia en la cual el arte refleja su tiempo, observándolo, aprendiendo de eventos pasados, como referente indudable para no cometer los mismos errores.